En el choque han resultado heridas otras cuatro personas, una de ellas grave. El causante del accidente dio positivo en cannabis, opio y cocaína
03/02/2024
GDH Digital
Una mujer de 68 años y su hijo de 39, vecinos de Oviedo, han fallecido este miércoles en la colisión frontal entre dos vehículos, al invadir uno de ellos el sentido contrario, en el concejo asturiano de Langreo. Además, según informó la Guardia Civil y el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), hay cuatro heridos, uno grave, otro con pronóstico reservado y dos leves.
El conductor del turismo, por su parte, dio positivo en la prueba de drogas realizada tras el siniestro, han informado este jueves fuentes cercanas a la investigación.
En el accidente fallecieron Pablo Atrio (39 años) y su madre, Remedios Fernández (68 años), esposa e hijo de un guardia civil retirado de Oviedo que resultó herido grave en el accidente junto a su nuera, también herida de gravedad.
Los dos heridos de mayor gravedad son el padre de Pablo y marido de Remedios, el guardia civil jubilado José Antonio Atrio, y Mercedes López, la mujer de Pablo. Todos viajaban en el mismo coche, contra el que impactó frontalmente el otro vehículo. El que conducía J. F. S., de 67 años y de El Entrego, dio positivo en drogas (cannabis, opio y cocaína); médico de formación, ya no ejerce y había estado implicado en una trama de falsificación de recetas.
José Antonio Atrio Canal, de 72 años, iba con su familia en el coche que conducía, ayer, en el corredor del Nalón. A las 12.50 horas el vehículo sufrió un brutal impacto quedando el coche, un Kia, en estado prácticamente irreconocible. Fueron los agentes de la Guardia Civil quienes llegaron los primeros al lugar del siniestro, en Sama, a la altura de Los Llerones, un tramo prácticamente recto y limitada la velocidad a 80 kilómetros por herida.
Es guardia civil jubilado; estuvo destinado en el Centro Operativo de Servicios (COS) en Oviedo. En el asiento del copiloto iba su mujer. Falleció tras el impacto. En los de atrás, su hijo -también perdía la vida- y la esposa de éste. La tragedia inundó en un instante a esta familia.
José Antonio Atrio Canal procede de una familia de tradición de servicio al público a través de la Guardia Civil. Su padre ya era miembro el cuerpo, por lo que él y su hermano -que fue especialista en desactivación de explosivos en Cantabria, y también se encuentra jubilado- se criaron en las casas cuartel y estaban familiarizados con los uniformes o los vehículos.
Desde estas líneas trasladamos nuestro más profundo pesar a la familia de los fallecidos, especialmente al guardia civil Jose Antonio a quién trasladamos igualmente nuestros mejores deseos de recuperación.
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