Detenida una mujer en Gijón acusada de matar a su hija de 6 años

Gijón ha amanecido hoy consternado. Una niña de 6 años ha sido encontrada muerta de madrugada en su vivienda en la avenida Gaspar García Laviana, número 71. La Policía Nacional, además, ha detenido a su madre, N.M.L. de 48 años, por su presunta implicación en los hechos. A expensas de conocer los resultados de la autopsia, la menor supuestamente habría ingerido barbitúricos, lo que provocó su muerte.

La Policía Nacional de Gijón recibió sobre las 23.00 horas una llamada de los familiares alertando que no lograban contactar con la mujer detenida. De inmediato, los agentes acudieron al lugar de los hechos, pero no pudieron acceder al piso que era de alquiler hasta pasada la media noche. Una vez dentro de la casa, encontraron a la niña ya fallecida tendida en la cama junto a su madre. La menor podría llevar varias horas muerta.

Por su parte, la mujer, al parecer, indicó que había tomado pastillas, y fue evacuada, ya detenida, al hospital de Jove de Gijón para observación. Por el momento, no pasará hoy a disposición judicial, pero ya ha abandonado el complejo sanitario custodiada por agentes en torno a las 11.30 horas para su trasladado a la Comisaría Nacional de Gijón, donde se le va a tomar declaración.

La mujer estaba separada y hacía dos días que el padre de la niña, Eugenio García, le había entregado a la hija tras pasar algunos días con él. García se acercó a las 13.00 horas, junto a su actual pareja, al portal en el que residía su hija. Visiblemente emocionado, aseguró que el pasado viernes, y tras cinco años de disputa, le habían concedido la custodia de la menor. Sus planes pasaban por recogerla el martes para llevarla a Astorga, donde reside actualmente.

Los vecinos

El suceso ha pillado por sorpresa a los vecinos de este edificio del barrio del Llano, quienes a pesar de haber coincidido con la mujer en contadas ocasiones su comportamiento era «desagradable».

«Las pocas veces que la vi, siempre se mostró un poco extraña y muy distante», asegura Manuela Álvarez, vecina de rellano. También la hija de esta fue testigo como alguna vez la mujer habló mal a su pequeña. No obstante, tras lo ocurrido, Manuela Álvarez reconoce que «quizás es que no estaba bien, igual tenía problemas, y no es que no fuera agradable».

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