Detenido un magrebí por rajarle la cara a un hombre y desfigurarle el rostro con una botella

La Policía Nacional ha detenido en Málaga a un joven de 29 años y origen magrebí por, supuestamente, cometer una sucesión de delitos en poco más de 12 horas y por presuntamente atacar con gran brutalidad a una de sus víctimas.

El herido tuvo que ser intervenido en el Hospital Regional para que le reconstruyeran el pómulo izquierdo. El inicio de los hechos se remonta a las 23:00 del pasado viernes y se ubica en la plaza de la Solidaridad de la capital malagueña. Fue el punto en el que el arrestado, supuestamente, trató de robar la cartera a un hombre, cuya resistencia venció causándole una herida en el rostro con una botella de cristal, señalaron fuentes policiales, que añadieron que el atacante escapó tras el ataque.

Hasta el lugar se desplazaron efectivos de la Policía Local y de los servicios sanitarios, que, después de evaluar el estado del agredido, acordaron su traslado en ambulancia al Hospital Regional. Las distintas fuentes consultadas precisaron que presentaba una “raja profunda” en el pómulo izquierdo que requirió una reconstrucción maxilofacial. La captura del presunto agresor se produjo el sábado de una curiosa forma. La Sala del 091 recibió una llamada en torno a las 13:00 de un ciudadano que informaba de que en la calle Mauricio Moro Pareto, en el entorno de la estación de autobuses, había un tipo que ofrecía a los viandantes un patinete eléctrico.

 Una patrulla de la Brigada de Seguridad Ciudadana se desplazó hacia la zona y localizó al sospechoso. Cuando los agentes estaban identificándolo, y se hacían indagaciones para conocer la procedencia del vehículo de movilidad personal, se aproximaron dos personas que les comentaron que esa persona era la supuesta autora de la agresión que la noche anterior había llevado a un conocido de ambos al hospital.

También portaba objetos sustraídos

Los policías realizaron pesquisas sobre este asunto y constataron que en el Hospital Regional ingresó un individuo con lesiones graves en el rostro y que se buscaba al atacante. Por lo que rápidamente fue detenido. Aunque no sería el único motivo del arresto. El investigado portaba entre sus propiedades con un teléfono móvil que fue incapaz de desbloquear a pesar de los requerimientos de los agentes.

Las sospechas de que había sido robado se disiparon en ese instante, cuando comenzó a sonar. Al descolgar escucharon la voz de una chica que contó que el terminal era propiedad de su padre y que se lo habían sustraído. El joven fue finalmente arrestado por los delitos de lesiones, robo con violencia, apropiación indebida y hurto, apuntaron las fuentes consultadas, que explicaron que no había un señalamiento sobre el patinete y se desconocía su procedencia.

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